La Cumbre de Líderes del G20 en noviembre pasado marcó un hito importante en la campaña de World Animal Protection para poner fin al comercio mundial de vida silvestre.
Aunque los líderes de las 20 economías más grandes del mundo no acordaron declarar que la causa de la pandemia de COVID-19, y la mayoría de las enfermedades infecciosas emergentes identificadas en las personas durante los últimos 70 años, se deriva de la vida silvestre, hay razones para estar atentos a la futura dirección del G20.
La pandemia de coronavirus atrajo una importante atención sobre cómo las personas tratan y explotan cruelmente a los animales silvestres para obtener ganancias económicas. Esta explotación tiene consecuencias considerables no sólo para los animales, sino también para la salud de las personas, el planeta y la economía mundial.
Desde que lanzamos nuestra campaña para acabar con el comercio de vida silvestre en abril de este año, más de un millón de ustedes firmaron nuestra petición alentando a los líderes del G20 a apoyar una prohibición de este comercio entre países y pedir a instituciones y organismos establecer mecanismos para desarrollar, facilitar y aplicar esta prohibición.
Decidimos centrarnos en el G20 porque, durante la crisis financiera de 2008, el G20 mostró su potencial como organismo de liderazgo mundial, acordando soluciones globales para estabilizar las economías del mundo. Por lo tanto, era muy probable que pudiera jugar un papel similar al acordar una respuesta colectiva y global a la pandemia de COVID-19 y prevenir pandemias futuras. Además, los gobiernos del G20 como una unidad pueden moverse más rápidamente que la mayoría de las instituciones de las Naciones Unidas y las organizaciones multilaterales, ya que hay menos países individuales y menos procesos burocráticos, y porque tienen un enorme peso económico y político.
Esta ha sido la campaña más extensa de World Animal Protection hasta la fecha, en términos del nivel de ambición, el número y la coordinación de campañas nacionales simultáneas y la demostración masiva de apoyo de todos ustedes.
Durante los últimos ocho meses, nos hemos unido al C20, un grupo de organizaciones de la sociedad civil de las 20 economías más grandes, y agregamos un objetivo explícito de frenar el comercio de vida silvestre a la plataforma de la coalición. Más de 300 organizaciones externas firmaron nuestra carta a la Organización Mundial de la Salud sobre la prevención de pandemias. Más de 120 organizaciones externas firmaron nuestra carta pidiendo a la Cumbre de Biodiversidad del G20 una prohibición total del comercio de vida silvestre. Nuestra influencia hizo que los ministros de agricultura del G20 dieran un gran paso adelante al acordar desarrollar una lista de especies de vida silvestre en riesgo de propagar enfermedades transmitidas por animales como COVID-19 y emitir pautas para mitigar este riesgo.
Durante este tiempo, China adoptó una legislación que prohíbe el consumo de vida silvestre, un país donde se desarrolla gran parte del comercio de vida silvestre. El Departamento de Estado de EE. UU. pidió el cierre de los mercados de vida silvestre de forma permanente y el Congreso presentó varios proyectos de ley que frenarían el comercio de vida silvestre para reducir los riesgos para la salud humana y proteger la biodiversidad.
En cuanto a los propios líderes del G20, el comunicado difundido durante la cumbre, aunque no mencionó la “vida silvestre”, pero ofreció algunas oportunidades para ayudar a frenar el comercio de vida silvestre. Destacó el deseo de ser proactivo en la “prevención” de una pandemia, así como la preparación, que anteriormente no existía. En el comunicado también fomentaba prácticas más sostenibles en el turismo, que "salvaguardan el planeta".
Todo eso es para decir que nos alienta y tenemos la intención de aprovechar el impulso que hemos visto en 2020 para poner fin al comercio de vida silvestre. El G20 será nuestro objetivo principal en 2021. Esperamos que una presidencia italiana esté más abierta a los límites del comercio que la presidencia saudí. Al igual que este año, esperamos que las diversas reuniones ministeriales del G20 durante los próximos 12 meses sean buenas oportunidades para continuar el diálogo con los líderes de los países. La Cumbre Mundial de Salud en mayo también brinda la oportunidad de discutir el impacto del comercio de vida silvestre en las pandemias y la salud pública, además del estatus consultivo general de World Animal Protection en las Naciones Unidas y el compromiso con gobiernos, organizaciones intergubernamentales, corporaciones, organizaciones civiles y grupos de la sociedad.
Esperamos que continúes este viaje con nosotros y aprovechemos el impulso de este año. No olvidemos lo duro que ha sido este año para muchas personas y para los animales silvestres, y canalizamos esa energía hacia un futuro más brillante para todos los habitantes de la tierra. Únete a nuestro movimiento:
Nuestra influencia hizo que los ministros de agricultura del G20 dieran un gran paso adelante al acordar desarrollar una lista de especies de vida silvestre en riesgo de propagar enfermedades transmitidas por animales, como el COVID-19, y emitir pautas para mitigar este riesgo.