Alternativas sostenibles para las comunidades ribereñas del Amazonas
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El equipo de Protección Animal Mundial estuvo en el Amazonas a fines del año pasado, para documentar la vida de las comunidades que viven de la pesca y la manera en que la moratoria del pez Mota, puede impactar en sus familias y el mercado local.
En un intento de poner fin a la masacre cruel e ilegal de los delfines rosados del Amazonas, cuya carne se ha utilizado como cebo para la pesca del pez Mota, Brasil comenzó a aplicar a principios de este año, una moratoria a la pesca y comercialización de dicho pez, causante de la muerte de miles de delfines.
Esta medida es un paso importante para proteger al mayor delfín de agua dulce del mundo, los delfines rosados del Amazonas. , quienes son los más grandes de agua dulce del mundo. Sin embargo, este problema no se resuelve solo, la venta del pez Mota, principalmente en Colombia, representa una gran fuente de ingresos para las comunidades costeras en el Amazonas.
Es por esta razón que los pescadores necesitan alternativas económicas. Ya que sus ingresos se verían afectados profundamente, existiendo aún el riesgo de que el pez Mota se comercialice ilegalmente a Colombia y por ende el delfín rosado seguirá siendo cazado.
Ahora bien, para hacer eficaz la moratoria, esta debe ir acompañada de la supervisión de los frigoríficos ilegales, mayor investigación y control de las poblaciones de delfines, por último, de apoyo gubernamental para el desarrollo de alternativas viables a las familias con ingresos que dependen del pez Mota para su sustento.
Protección Animal Mundial pide también a Colombia, país que consume más pez Mota brasileño, el fin del comercio de pescado en todo su territorio.