Entiende como los cerdos son criados
Para entender los estándares de bienestar animal que queremos en Chile, primero es necesario saber cómo estos animales son criados en el país.
Desde el año 2009 Chile cuenta con la Ley Nº 20.380 sobre Protección de los Animales y tres reglamentos complementarios específicos para los animales de producción. Ese fue un paso importante, pero cambios fundamentales aún necesitan ser incorporados a la legislación chilena.

Una vida de sufrimiento
En cada etapa de los actuales sistemas de producción intensiva de Chile, los cerdos sufren problemas de bienestar.
Miles de hembras gestantes viven parte o toda la vida en apretadas jaulas. Aun cuando pasan la mayor parte de la gestación en grupo, las condiciones del ambiente muchas veces no son ideales: el piso sólo de rejilla- sin enriquecimiento ambiental con uso de heno, por ejemplo- es incómodo y hiere sus patas.
Todos los años, unas 170 mil cerdas dan la luz en promedio a 3 millones de lechones en Chile. La mayoría de los lechones sufre mutilaciones en sus primeros días de vida. Partes de sus orejas son cortadas para identificación, aun ya existiendo una alternativa menos dolorosa – el tatuaje. Sus colas también son cortadas sin anestesia.

Peleas y enfermedades
Los cerdos son animales naturalmente curiosos. Ellos tienen personalidades diferentes, son muy inteligentes y sociales, capaces de demostrar empatía unos con otros. A los cerdos también les gusta explorar: paja, una cuerda colgando del techo, o aun una pelota, es lo suficiente para distraerlos.
La falta de que hacer, sumada al hacinamiento del ambiente, causa frustración para la especie. En los galpones sin enriquecimiento, los lechones están aburridos y se hacen daño unos a los otros.
La alta densidad también es motivo de peleas y facilita la transmisión de enfermedades que afectan los animales y, a veces a los humanos. Entre las más comunes, está la salmonella.
Cambia la vida de los cerdos: ¡firma nuestra petición ahora!
Pide al Ministerio de Agricultura que cree una legislación para acabar con prácticas anticuadas y crueles en la cría de cerdos, como la castración sin anestesia, el corte de orejas y la gestación en jaulas.
Bienestar como la solución
Mejorar la calidad de vida de los cerdos con prácticas de bienestar animal hacen innecesarios estos métodos anticuados y crueles.
Un ejemplo es la eliminación del corte de colmillos en los lechones, práctica que cada vez es menos común entre los productores de cerdo no solo en Chile, sino a nivel mundial.
Ahora, falta una normativa que establezca procedimientos estándar para toda la industria. Con tu apoyo, queremos hacer de esa y otras prácticas de bienestar una realidad para los más de 3 millones de cerdos criados en el país.